Cuánto se habla y qué poquito se hace por ella.
El pasado sábado fue el Día Internacional de la Paz y muchos telediarios hablaron sobre ello. Sin embargo, como es habitual, la gran mayoría de noticias muy poco tenían que ver con la paz.
Bombardeos en Gaza, guerra en Ucrania, personas que llegan en patera huyendo de conflictos como los de Mali o Sudán... Desgraciadamente, cada año hay millones de personas que se ven obligadas a desplazarse en busca de paz.
Hay quienes la buscan durante días, meses e incluso años; quienes la echan de menos, porque hace tiempo que la perdieron, y hay quienes, a pesar de haber escuchado hablar de ella, jamás la han conocido.
El objetivo de este día, según la ONU, es impulsar la búsqueda de la paz como un derecho humano fundamental.
Pero, desde luego, las autoridades políticas no están haciendo todo lo necesario para impulsarla. Porque no basta con celebrar el Día de la Paz; ni con ponerse un lazo blanco en la solapa de la chaqueta y hacer declaraciones pidiendo "la paz en el mundo".
La paz se construye con medidas justas y valientes. Por eso, desde CEAR seguimos reclamando a la comunidad internacional una respuesta eficaz para detener el genocidio en Gaza, y trabajamos cada día para que quienes huyen de la guerra tengan un refugio en el que vivir en paz. |
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