Un apartheid de género.
Así ha definido expertos de la ONU la nueva ley aprobada en Irán y que endurece aún más las penas que se impondrán a mujeres que no lleven el velo. O que hagan un mal uso de él. O que lleven ropas finas o ajustadas. La cuestión es que ni se vea ni se intuya ninguna parte del cuerpo de la mujer.
Todo esto la misma semana en que se cumplía un año de la muerte de Mahsa Amini a manos de la policía de la moral, quienes vigilan el cumplimiento del código de conducta. El motivo de su detención: simplemente, el mal uso del velo.
Y un año después, la situación de las mujeres en Irán no ha mejorado. Todo lo contrario.
En los últimos 12 meses, más de 500 personas han muerto y 22.000 han sido arrestadas por las protestas para exigir derechos para las mujeres; en julio se confirmó que la policía de la moral volvería a patrullar; y ahora esta nueva ley.
Una ley que ya ha sido definida como un apartheid de género. Que es un paso más del régimen iraní en la violación de derechos de las mujeres y niñas, y que suponen más discriminación y más represión.
En CEAR no nos olvidamos de las mujeres de Irán, Afganistán o en cualquier otro lugar en el que son amenazadas, perseguidas y castigadas solo por ser mujeres.
Es necesario garantizar el refugio por motivos de género.
Por todas las Mahsa Amini del mundo.
Para que puedan vivir en paz y dignidad. |
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