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¿Te imaginas cómo es trabajar en un hospital en Ucrania?
Compartimos este diálogo entre Héctor Castiñeira (Enfermera Saturada) y Oksana Dzham, enfermera en uno de los hospitales que apoya UNICEF en Ucrania, para que conozcas de primera mano cómo es trabajar en medio de las enormes dificultades que deja una guerra.
Tras 2 años de guerra en Ucrania el impacto es devastador en el ámbito de la salud de los niños, niñas y sus familias. En las zonas de primera línea han pasado entre 3000 y 5000 horas refugiados en sótanos y estaciones de metro subterráneas, el equivalente a 4 a 7 meses, con la enorme repercusión que esto tiene en su salud mental: miedo, estrés, ansiedad, y otros trastornos psicológicos que necesitan atención urgente.
Pero también afecta al funcionamiento de los centros sanitarios y al trabajo que diariamente llevan a cabo los profesionales sanitarios, en un entorno en el que sobrevivir es el día a día. “Resistencia y adaptación”, describe la propia Oksana cuando las necesidades no paran de crecer.
A pesar de todo, es emocionante oír a esta enfermera ucraniana contar que no se arrepiente nunca de lo que está haciendo: ¡ayudar a la gente! A las madres y a los niños que necesitan una atención que no puede esperar a que todo pase.
Afortunadamente, los escasos recursos con los que cuenta se multiplican con la ayuda de UNICEF, tan fundamental a la hora de salvar y proteger a la infancia, y que a su hospital llega en forma de agua, electricidad, material sanitario y espacios seguros para la estancia de las madres y los niños. Solo en 2023, UNICEF dio acceso a atención sanitaria a más de 5 millones de niños y mujeres. |
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