Save the children. No hablamos de regalos.

 

Gaza ya no está en el centro de la conversación. No aparece cada día en las noticias. No genera titulares constantes. Y menos en esta época de luces, villancicos y celebraciones. Pero para los niños y niñas que han vivido el infierno durante dos años, nada ha terminado. Las lluvias de las últimas semanas han inundado los campamentos improvisados y muchas familias lo han perdido todo otra vez. Los niños y niñas duermen directamente sobre el suelo mojado, con ropa ligera empapada por aguas residuales, sin mantas secas ni un espacio donde protegerse del frío. Expuestos a enfermedades. Cada noche es más larga. Cada madrugada, más dura. SI PUEDES, POR FAVOR, DONA AHORA Khalil es padre de dos niños, y su esposa acaba de dar a luz en condiciones extremas. En el vídeo que hemos recibido desde Gaza, mientras intenta escurrir una manta completamente empapada que ha utilizado inútilmente para intentar reforzar su refugio, nos dice: "Sinceramente, no sé qué hacer. Estoy muy frustrado y muy cansado. Llevo cavando desde ayer (...) no sé a quién acudir ni qué hacer. Estas tiendas no protegen ni de la lluvia, ni del calor del verano. (...) Mis hijos también están muy cansados".   Es muy difícil imaginar lo que siente un padre o una madre cuando ya no puede proteger, ni consolar, ni ofrecer un mínimo de dignidad a sus hijos. Y esta sensación se repite, día tras día, en miles de familias que viven una situación cada vez más desesperada. Incluso cuando no llueve, las noches son extremadamente frías. Los niños y sus familias no tienen ropa de abrigo y viven hacinados en la estrecha "zona humanitaria", atrapados entre muros de hormigón y el viento frío que llega del mar. Cuando todo falla, lo más básico se vuelve vital. Ya no es ni siquiera un coche de carreras, una muñeca o el juguete de moda. No son los planes en familia y las celebraciones. Nada de eso cabe en sus pensamientos, porque para ellos el mejor regalo en estos momentos sería un refugio que no se inunde, una manta seca y cálida, un colchón que no huela a agua sucia ni les haga enfermar. Algo tan simple... y tan urgente. Tu donación se transforma directamente en artículos esenciales para el invierno. Ayúdanos a proteger a la infancia de Gaza. Colabora ahora: 20 € 40 € 60 € Otra cantidad Gracias por detenerte. Gracias por mirar de frente una realidad incómoda, y por dar un sentido real a estas fechas. Y gracias por abrigar donde el invierno golpea más fuerte. Un abrazo, Mónica Bedmar Save the Children P.D.: hasta el 31 de diciembre, tu donación cuenta para la próxima Declaración de la Renta. Es una oportunidad de ayudar ahora y, además, beneficiarte de la desgravación fiscal. Si quieres calcular cuánto puedes desgravarte exactamente, puedes hacerlo aquí. Hazte socio    |  Haz una donación   |   Contacta con nosotros