La gran mayoría de niños y niñas que viven en Gaza no han conocido la paz nunca. Y si la comunidad internacional no hace nada para acabar con la violencia en la Franja, quizás no la conozcan.
Ya no la conocerán los más de 4.500 niñas y niñas que han muerto en Gaza durante estas semanas. Y según ha alertado Unicef, las vidas de más de un millón de niños y niñas "cuelgan de un hilo".
Porque los bombardeos continúan y la violencia ya ha provocado el desplazamiento de más de 700.000 menores. Porque la ayuda humanitaria sigue siendo insuficiente y no tienen asegurado ni el acceso agua potable, y porque ni siquiera en los hospitales se está a salvo.
Las condiciones sanitarias se agravan. Según informa Naciones Unidas, los hospitales infantiles de Al Rantisi y Al Naser han reducido drásticamente su actividad por la falta de combustible, y el asedio al hospital de Al Shifa, el más grande de la región, ha provocado que 37 bebés prematuros fueran trasladados a quirófano este fin de semana por la falta de incubadoras.
¡BASTA YA! La comunidad internacional no puede seguir mirando hacia otro lado mientras Gaza desaparece ante nuestro ojos. Es vergonzoso que ni siquiera exista acuerdo para pedir un alto al fuego humanitario.
En CEAR no vamos a dejar de pedirlo; porque hay un millón de niñas y niños a los que hay que garantizar la protección, asegurar un futuro y permitirles crecer en paz. Por eso, pedimos el fin de la violencia y la protección de la población civil. |
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Con tu ayuda seguiremos alzando la voz.
Por el respeto al derecho internacional, por solidaridad y por humanidad. |
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