La Europa con la que soñamos no es esta.
La Europa con la que soñábamos era un espacio de cooperación y de solidaridad, una Europa moderna y abierta al mundo, en la que los derechos humanos no se cuestionaban, porque eran parte de su bandera, de sus valores y de su misma identidad.
Esa Europa no hubiera aceptado el vergonzoso Pacto Europeo de Migración y Asilo que se aprobó en abril, ni hubiera delegado el control de fronteras a Marruecos o a Libia, y desde luego, no hubiera permitido que algunos de sus Estados miembro acogiesen personas, mientras otros simplemente pagasen para no acoger a nadie.
Los resultados de las elecciones europeas confirman que las fuerzas políticas con discursos racistas y xenófobos cada vez tienen más representación en el Parlamento Europeo y eso se está traduciendo en políticas migratorias cada vez más deshumanizadoras y que socavan gravemente el derecho de asilo.
Corremos el riesgo de alejarnos aún más de la Europa con la que soñamos. Y tenemos que hacer algo para rescatar ese sueño y mirar al futuro con esperanza.
Por eso, desde CEAR hacemos un llamamiento a la ciudadanía para exigir al Gobierno español que cumpla con sus obligaciones internacionales y lidere esa Unión Europea con la que soñamos, y que sea un lugar en el que poder vivir en paz y libertad, independientemente de donde hayas nacido. |
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