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De nuevo Haití está sufriendo. El país volvió a ser víctima, el pasado sábado, de un severo terremoto de magnitud 7,2 que derrumbó hospitales, escuelas y hogares y que por el momento se ha cobrado la vida de más de 1.000 personas, incluidos niños. Ahora, esta grave situación se ve amenazada por la tormenta tropical Grace que sitúa a una comunidad ya vulnerable, al borde del abismo.
Desde el primer minuto los equipos de UNICEF en Haití han estado trabajando en donde la ayuda es más necesaria para brindar apoyo a las comunidades más afectadas.
Pero ahora, una tormenta tropical amenaza aún más vidas. Debemos actuar lo antes posible.
Por favor, dona ahora para proteger a los niños más afectados y a sus familias.
El tiempo corre en su contra. Ayúdalos.
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